Dos jóvenes de Calp vivieron de primera mano la tragedia que ha ocurrido esta madrugada en el Medusa Festival de Cullera.

Sobre las 4:15 horas un viento huracanado de hasta 80km/h se llevó por delante parte del escenario principal y la entrada del festival, aunque el caos comenzó minutos antes con los primeros desprendimientos.

Según fuentes sanitarias, se ha confirmado el fallecimiento de un joven de 22 años y hay al menos 40 heridos de distinta relevancia.

El Medusa Festival, que esperaba reunir a unas 320.000 personas hasta el lunes, ha cancelado definitivamente el evento tras su regreso pospandemia.

Así ocurrió todo

Sobre las 3:35 horas de la madrugada comenzó a levantarse un viento leve, pero que inicialmente obligó a cancelar la sesión del DJ Alex Martini en el escenario Rainbow, justo antes del show de Santi Bertomeu.

Según testigos presenciales, con el paso de los minutos y ante el total desconocimiento de lo que sucedía, comenzaron los rumores entre el público de un posible desalojamiento, pero no se comunicó nada desde la organización.

“A las 3:45 horas decidimos descansar en una zona alejada dentro del escenario principal y esperar a que comenzará el show de D-Block&S-te-fan”, narraba uno de los calpinos.

La situación se hizo insostenible a las 4:00 horas. “Repentinamente comenzó un viento huracanado y arenoso que quemaba, parecía una tormenta de arena”, explicaba el otro.

A los pocos minutos comenzó el caos, un trozo de madera se desprendió de la parte superior de la Zona VIP e impactó directamente en la cabeza de una mujer.

Ante esta tesitura, los dos calpinos optaron por meterse en la barra de bebidas para salvaguardarse, pero según afirman “cuando nos quisimos dar cuenta, todas las maderas superiores se estaban desprendiendo y los hierros se doblaban”.

“Hemos salido corriendo y dos maderas han caído a nuestro lado”, cuenta uno de los jóvenes, todavía en shock.

“Lo último que recuerdo es ver un caos absoluto: desconcierto general, material volando de forma descontrolada, gritos y mucha incertidumbre”, cuenta el otro.

Finalmente, los dos jóvenes de Calp se resguardaron en una zona metálica «segura» hasta que amainó el vendaval.

No tardaron en llegar los servicios de emergencias y comenzó el desalojo de las instalaciones, aunque esto también resultó un caos, ya que la entrada principal del Medusa Festival estaba totalmente devastada y otras muchas salidas estaban obstruidas.

Más noticias en Calp Al Día.